Y ahora gozo mi vida escribiendo, he gozado la vida amando, la he gozado volando, la he gozado con mi familia, con mis padres y hermanos, con mi esposa y mis hijos, con mis amigos y he llegado a la conclusión que sin darme cuenta la he gozado con aquellas personas a las que les he parecido antipático. No nada más quisiera ser un soñador que va por la vida sin dejar nada. Quiero confiar en un mañana mejor viviendo bien el día que hoy tengo entre manos. El mundo es un teatro inmenso donde todos somos actores y lo único que quiero es que nadie se quede atrás, ni huya que esta obra de teatro solo tiene un acto, no hay intermedio. Unos ríen, otros lloran y gritan, unos sufren y otros se asustan. Quien llora espera consuelo, quien ríe quiere consolar. Quien trabaja ayuda al que no puede....... ya comenzó mi espectáculo, solo me resta vivir, solo me queda escribir y voy a hacer mi papel ayudando a vivir y a sonreír, a silbar y a cantar, a que cada quien crea en Dios a través de mis personajes, para que cuándo el abuelito se vaya a dormir, le diga a su nieto: "Esta noche quiero dormir feliz, cuéntame la historia del LLANTO DEL DELFÍN del Capitán Lavín.........”
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