La conciencia es aquella voz interior que sabe lo que está bien y lo que está mal.
Todos tenemos la experiencia de esta voz interna.
Los principios objetivos de la moralidad son la ley moral que nace del hecho de ser persona y la ley de Dios que nace del hecho de ser hijo suyo por el bautismo. Las dos leyes están inscritas en el corazón del hombre. La ley perfecciona y da fuerza a la ley moral.
La conciencia debe ser formada y encauzada rectamente.
La Oración y los Sacramentos especialmente la confesión, iluminan la conciencia y fortalecen la voluntad para actuar siempre con sinceridad.
La conciencia es la inteligencia humana cuando juzga prácticamente sobre la bondad o maldad moral de los actos humanos.
La conciencia es el núcleo mas secreto y el sagrario del hombre, en el que estamos a solas con Dios.
La conciencia moral es la voz interior que ilumina los actos humanos por el conocimiento inscrito por Dios en el corazón.
El juicio de la conciencia actúa de acuerdo con los principios morales de la persona que juzga y de acuerdo con la ley de Dios.
Los criterios de juicio de la conciencia deben ser: a) Mis obligaciones como persona responsable: búsqueda de la verdad, respeto de mi dignidad, cuidado de mi cuerpo y de mi alma. b) Mis obligaciones familiares: amor, respeto, colaboración. c) Mis obligaciones sociales: Justicia, solidaridad, veracidad, testimonio. d) Mis obligaciones de estado: estudiante, trabajador, empresario, casado, soltero, célibe. e) Mis obligaciones religiosas: Fe, Esperanza, Caridad, Oración, vida de Sacramentos.
Todos tenemos la experiencia de esta voz interna.
Los principios objetivos de la moralidad son la ley moral que nace del hecho de ser persona y la ley de Dios que nace del hecho de ser hijo suyo por el bautismo. Las dos leyes están inscritas en el corazón del hombre. La ley perfecciona y da fuerza a la ley moral.
La conciencia debe ser formada y encauzada rectamente.
La Oración y los Sacramentos especialmente la confesión, iluminan la conciencia y fortalecen la voluntad para actuar siempre con sinceridad.
La conciencia es la inteligencia humana cuando juzga prácticamente sobre la bondad o maldad moral de los actos humanos.
La conciencia es el núcleo mas secreto y el sagrario del hombre, en el que estamos a solas con Dios.
La conciencia moral es la voz interior que ilumina los actos humanos por el conocimiento inscrito por Dios en el corazón.
El juicio de la conciencia actúa de acuerdo con los principios morales de la persona que juzga y de acuerdo con la ley de Dios.
Los criterios de juicio de la conciencia deben ser: a) Mis obligaciones como persona responsable: búsqueda de la verdad, respeto de mi dignidad, cuidado de mi cuerpo y de mi alma. b) Mis obligaciones familiares: amor, respeto, colaboración. c) Mis obligaciones sociales: Justicia, solidaridad, veracidad, testimonio. d) Mis obligaciones de estado: estudiante, trabajador, empresario, casado, soltero, célibe. e) Mis obligaciones religiosas: Fe, Esperanza, Caridad, Oración, vida de Sacramentos.
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