lunes, 9 de julio de 2007

¿TE GUSTAN LAS LEYENDAS? LAS CIRUELAS DEL MOGOTE


Amigos, amigas, esta es una de las leyendas que escuché, cuando llegué a La Paz allá por junio de 1966 y se refiere a la CIRUELAS DEL MOGOTE. Primero dejenme decirles que todos los humanos normalmente le tenemos aversión a alguna comida en especial, unos a los mariscos, otros a la carne, otros a alguna verdura o a cierto platillo. Yo no soy la excepción, desde muy niño me opuse a comer dos verduras: los chayotes y los betabeles. Y desde el día que me enteré de esta leyenda me he negado a comer las CIRUELAS DEL MOGOTE, nunca las he comido, y nunca las comeré, díganme ustedes si tengo razón o si no la tengo. Primero permítanme explicarles que son estas ciruelas: es un fruto silvestre que crece en esta parte de la república sobre todo en el cauce de los arroyos. Hay quien dice que las más sabrosas son la que se encuentran sobre los arroyos del Piojito y del Cajoncito, son de color amarillo cuando ya estan maduras, tanto en la cáscara como en la pulpa. Hay que comerlas cuando están maduras, pues son agridulces. En su interior mantienen un hueso al que le dicen CHUNIQUE en cuyo interior tenemos una almendra, la que a muchos niños les encanta. También me enteré que a los cargadores del antiguo muelle fiscal les decían los CHUNIQUES, ellos se dedicaban a bajar y subir la carga de los pequeños buques que llegaban a este muelle antes de que llegara el FERRY. este muelle se encuentra en el malecón, y a un lado se encontraba un galerón donde estaban las oficinas de estos cargadores, esperando la llegada o salida de los buques. Cruzando la calle se encontraba la Aduana Maritima de La Paz en una casona vieja que perteneció a la familia Ruffo. (ahora hay una nevería y un restaurante)

Cuenta la leyenda que estas CIRUELAS DEL MOGOTE solucionaron un gran conflicto entre los Guaycuras, que eran los indígenas que habitaron esta parte de la península. Esta tribu estaba conformada por varias familias que tenían su propio nombre. En la zona del Mogote estaban las familias de los Guamichis y los Aripas que continuamente se peleaban por defender los límites de sus propiedades. Hubo cierta ocasión donde los Aripas lograron capturar a la hermosa hija del rey Guamichi, ella se llamaba INMIGNÁ. Su padre muy desconsolado envió varias embajadas para suplicar que se la devolvieran, pero todos sus esfuerzos fueron inútiles, ya que el rey Aripa no la quiso devolver. Como último recurso se le ocurrió enviarle al rey Aripa, gran cantidad de las ciruelas que crecen en el Mogote dentro de un gran caparazón de Caguama. Todo el pueblo de los Aripas comieron de estas ciruelas y le dieron de comer de ellas a su hijo, tanto le gustaron las ciruelas al joven, quien fue el encargado de llevar a la princesa Guamichi a su casa, que se quedo a vivir con ella dentro de esta familia Aripa.

La lleyenda trae como colorario, que todo aquel que come CIRUELAS DEL MOGOTE, se queda a vivir muy bien casado en esta región. Es por esto amigos y amigas que yo no como de estas ciruelas, no vaya a ser que me quede por acá a vivir, muy bien casado.

1 comentario:

Unknown dijo...

Muy linda su entrada, yo pertenezco a La Paz, ahora que me encuentro lejos de mi tierra extraño muchísimo esta fruta tan deliciosa ya que no es común encontrarla en otras partes de la república. Sin embargo la foto no pertenece a las ciruelas del mogote o las ciruelas que crecen en el piojillo o el cajoncillo, esas son de otra especie y me parece que son más comunes. Solo quería puntualizar este dato. Por lo demás, gracias ya que espacios como este recuerdan las delicias de mi tierra.